Tras la muerte del papa Francisco, el proceso para elegir a su sucesor ha desencadenado lo que algunos analistas describen como una «batalla» entre cardenales, marcada por profundas divisiones ideológicas dentro de la Iglesia católica. Este enfrentamiento enfrenta principalmente a dos grupos: los reformistas, que buscan continuar las políticas progresistas de Francisco, y los conservadores, que abogan por revertirlas o frenarlas. A continuación, se detalla el contexto, los factores clave y los posibles candidatos, basándose en información reciente.
Contexto de la «batalla»
Francisco, el primer papa del sur global, transformó significativamente el Colegio Cardenalicio, que es el cuerpo encargado de elegir al nuevo pontífice. Durante su papado, rompió con la tradición de nombrar cardenales automáticamente de diócesis históricas (principalmente en Italia, Europa y Estados Unidos) y diversificó el grupo, otorgando capelos rojos a representantes de países como Tonga, Myanmar, Mongolia, la República Centroafricana y Haití.. De los 252 cardenales actuales, 135 son electores (menores de 80 años), y aproximadamente el 81% de ellos fueron nombrados por Francisco, lo que inclina la balanza hacia su legado reformista.. Sin embargo, un grupo conservador, aunque minoritario, sigue siendo influyente, especialmente en los debates previos al cónclave.
La elección del próximo papa no solo determinará quién liderará a los 1,300 millones de católicos, sino también el rumbo de la Iglesia en temas como la inclusión de mujeres, la bendición de parejas del mismo sexo, los acuerdos con China y la lucha contra la corrupción y los abusos sexuales. Las reformas de Francisco, impulsadas a través del Sínodo de los Obispos, han generado resistencia entre los sectores más tradicionales, que critican su apertura a cambios doctrinales y pastorales..
Factores clave en el cónclave
- Composición del Colegio Cardenalicio:
- Actualmente, hay 135 cardenales electores, de los cuales 108 fueron nombrados por Francisco, 21 por Benedicto XVI y 4 por Juan Pablo II.. Esto sugiere una ventaja para los reformistas, pero el proceso requiere una mayoría de dos tercios (al menos 89 votos), lo que obliga a buscar consensos..
- La representación geográfica es más diversa que nunca, con 70 países representados. Europa sigue siendo la región con más electores (51), seguida de Asia (23), África (18), Sudamérica (17), América del Norte (16), América Central (4) y Oceanía (4)..
- Divisiones ideológicas:
- Reformistas: Apoyan la continuidad del legado de Francisco, que incluye una mayor inclusión de laicos y mujeres (como la posible ordenación de diaconisas), el diálogo con comunidades LGBTQ+, la descentralización del poder vaticano y la transparencia financiera..
- Conservadores: Prefieren un retorno a posturas doctrinales más tradicionales, oponiéndose a cambios en temas como el celibato, la ordenación de mujeres o la bendición de uniones homosexuales. Algunos han criticado abiertamente a Francisco, como el cardenal australiano George Pell, quien calificó su pontificado de «catastrófico»..
- Grupos como The Red Hat Report y sitios como The College of Cardinals Report han intentado influir en el cónclave, recopilando información sobre cardenales para promover candidatos conservadores..
- Influencia externa:
- Los cardenales mayores de 80 años, aunque no votan, juegan un papel crucial en las discusiones previas al cónclave, conocidas como «congregaciones generales», y en conversaciones informales en Roma..
- Se han reportado maniobras previas al cónclave, como la distribución de libros críticos con Francisco (El próximo papa) por parte del cardenal estadounidense Timothy Dolan, o el apoyo del fallecido cardenal Pell al conservador húngaro Péter Erdő..
- Protocolo del cónclave:
- Tras la muerte de Francisco el 21 de abril de 2025, se inició el período de Sede Vacante, gestionado por el cardenal camarlengo, Kevin Farrell..
- El cónclave debe comenzar entre 15 y 20 días después del fallecimiento (principios de mayo de 2025). Los cardenales se reunirán en la Capilla Sixtina para votar en rondas diarias hasta alcanzar los dos tercios necesarios..
Candidatos destacados
Aunque cualquier hombre bautizado y no casado puede ser elegido papa, en la práctica, el elegido suele ser un cardenal. A continuación, algunos de los nombres más mencionados, según fuentes recientes:
- Pietro Parolin (Italia, 70 años): Actual secretario de Estado del Vaticano, es considerado un moderado con experiencia diplomática. Su capacidad para generar consensos lo posiciona como un favorito, aunque su cercanía al poder podría generar resistencias..
- Matteo Zuppi (Italia, 69 años): Arzobispo de Bolonia y presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, es un aliado de Francisco conocido por su enfoque progresista, su trabajo con los marginados y su defensa del Concilio Vaticano II..
- Luis Antonio Tagle (Filipinas, 67 años): Apodado el «Francisco asiático», es moderado, carismático y comprometido con los pobres y los migrantes. Su oposición al aborto y la eutanasia, combinada con su apertura hacia las personas homosexuales, lo hace un candidato atractivo para un equilibrio entre tradición y modernidad..
- Fridolin Ambongo (República Democrática del Congo, 65 años): Arzobispo de Kinshasa, es un conservador cultural que se opone al matrimonio igualitario, pero su defensa de la Iglesia en un contexto de persecución lo convierte en una figura fuerte para un posible papa africano..
- Péter Erdő (Hungría, 72 años): Arzobispo de Budapest, es un conservador con experiencia en diálogo ecuménico. Su apoyo a la jerarquía tradicional y su oposición al celibato opcional lo hacen atractivo para los sectores más ortodoxos..
- Raymond Leo Burke (Estados Unidos, 76 años): Cardenal ultraconservador, crítico de las reformas de Francisco. Aunque su nombre ha sido mencionado, su postura radical y las tensiones con el Vaticano reducen sus posibilidades..
- Cardenales mexicanos: Carlos Aguiar Retes (75 años, arzobispo de México) y Francisco Robles Ortega (76 años, arzobispo de Guadalajara) están entre los electores, pero no figuran como favoritos..
- Otros nombres: Cardenales como Malcolm Ranjith (Sri Lanka), Anders Arborelius (Suecia), Pierbattista Pizzaballa (Italia) o Peter Turkson (Ghana) también han sido mencionados, aunque con menor fuerza..
Dinámicas y expectativas
La elección del próximo papa será un reflejo de las tensiones entre tradición y modernidad. Los reformistas, respaldados por la mayoría de los cardenales nombrados por Francisco, probablemente buscarán un candidato que continúe su agenda de inclusión, descentralización y transparencia. Sin embargo, los conservadores, apoyados por redes influyentes (especialmente en Estados Unidos), intentarán frenar estas reformas, posiblemente promoviendo un candidato moderado pero doctrinalmente ortodoxo.
El cónclave también estará influenciado por la percepción del legado de Francisco. Algunos cardenales podrían preferir un papa menos mediático y disruptivo, optando por una figura discreta que consolide los cambios sin generar nuevas controversias.. Además, la creciente representación de África y Asia podría inclinar la balanza hacia un papa no europeo, aunque Europa, con 51 electores, sigue teniendo un peso significativo..
Conclusión
La «batalla» entre cardenales no es solo una lucha por el poder, sino una pugna por definir el alma de la Iglesia católica en el siglo XXI. Con un Colegio Cardenalicio mayoritariamente alineado con Francisco, es probable que el próximo papa continúe su legado reformista, aunque la necesidad de consenso podría llevar a la elección de un candidato de compromiso. Nombres como Parolin, Zuppi o Tagle destacan como opciones viables, pero el cónclave es un proceso impredecible, y, como dice el refrán vaticano, «el que entra como papa, sale como cardenal».. Los próximos días, tras el funeral de Francisco el 26 de abril de 2025, serán cruciales para observar cómo se desarrollan estas dinámicas.
