Estados Unidos ha revocado visas a políticos mexicanos, incluyendo a la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila, su esposo Carlos Torres, el alcalde de Matamoros y otras 14 personas, sin proporcionar explicaciones públicas. Según el Departamento de Estado, estas decisiones son internas y no requieren justificación, aunque podrían estar relacionadas con investigaciones sobre corrupción o vínculos con el crimen organizad. Este es el primer caso documentado de un gobernador en funciones que pierde su visa estadounidense, lo que ha generado tensiones diplomáticas y especulaciones políticas.
Las revocaciones ocurren en un contexto de fricciones entre México y EE.UU., exacerbadas por acusaciones de Donald Trump sobre la crisis migratoria, el tráfico de drogas y disputas comerciales, incluyendo amenazas de aranceles. La falta de transparencia ha alimentado rumores, y algunos políticos mexicanos, como Ávila, han consultado abogados para apelar o solicitar nuevas visas, aunque las opciones legales son limitadas. El gobierno mexicano no ha exigido explicaciones formales, pero el caso podría tener implicaciones políticas y electorales en México, especialmente en estados fronterizos como Baja California.

Las causas específicas de las revocaciones de visas a políticos mexicanos por parte de Estados Unidos no han sido divulgadas públicamente, ya que el Departamento de Estado no está obligado a proporcionar explicaciones. Sin embargo, basándose en información disponible y patrones históricos, las posibles causas incluyen:
- Investigaciones por corrupción: Las autoridades estadounidenses podrían sospechar de actividades corruptas, como enriquecimiento ilícito o malversación de fondos, lo que justificaría la revocación bajo regulaciones de elegibilidad de visas.
- Vínculos con el crimen organizado: Se especula, especialmente en publicaciones en X, que algunos políticos, incluidos miembros de Morena, podrían estar bajo investigación por presuntas conexiones con el narcotráfico o grupos criminales, una causa común para la cancelación de visas.
- Razones políticas o diplomáticas: Las revocaciones podrían ser una señal de presión de EE.UU. hacia México en un contexto de tensiones por temas como migración, tráfico de drogas o disputas comerciales, especialmente tras las recientes declaraciones de Donald Trump sobre aranceles y seguridad fronteriza.
- Incumplimiento de requisitos de visa: Aunque menos probable, violaciones técnicas, como proporcionar información falsa o no cumplir con las condiciones de la visa, podrían estar en juego.
La falta de transparencia ha generado especulaciones, y algunos analistas sugieren que las revocaciones podrían tener motivaciones políticas internas en México, como debilitar a ciertos actores antes de procesos electorales. Sin embargo, no hay evidencia concreta que confirme estas teorías. Los afectados, como la gobernadora Marina del Pilar Ávila, han buscado asesoría legal, pero las apelaciones son difíciles sin información oficial.